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La última fecha del mítico festival se vivió con mucha nostalgia y alegría. Grandes bandas volvieron a la escena y muchxs artistas hicieron colaboraciones entre ellxs.
Fotos: Sofía Pérez
Con las pilas recargadas, el segundo día del Quilmes Rock llevó adelante un despliegue de artistas de todos los géneros, desde el pop de Juan Ingaramo, pasando por la salsa de Nathy Peluso hasta el rock pesado del tan esperado regreso de Catupecu Machu. Tecnópolis reunió a mucha más gente que la primera jornada que llegó al predio desde temprano.
La noche se tiñó de muchas emociones. La ex banda liderada por Fernando Ruiz Díaz dio un show emotivo en memoria de Gabriel, su hermano y fiel compañero musical. Con lágrimas en los ojos, el actual cantante de Vanthra elevó unas palabras a su público fiel y a su mano derecha y la fuerza del rock hizo todo el resto.
Es el show más importante de mi vida - Fernando Ruiz Díaz
Clásicos como Perfectos Cromosomas, La Piel del camino, Confusión y Dale prendieron fuego los enormes parlantes que estaban a los costados del escenario. El collar plateado de Fer con el logo de Catupecu resplandecía en las pantallas de led que lo hacían elevar con orgullo una insignia que marcará a muchos por el resto de las generaciones que tengan el cálido agrado de escucharlos.
La Aplanadora del Rock, marcando terreno
Antes de Catupecu, en el escenario de al lado - el Rock -, Divididos armó el escenario tal y como lo presentan siempre en sus shows. Los tres músicos salieron a escena tras el famoso cántico "Escuchenlo, Escuchenlo" que iba en aumento a medida que el cronómetro descontaba los segundos que faltaban para que arrancara la Aplanadora.
Tras el sonar del Himno Nacional Argentino cantado por Mollo, la banda arrancó con su power característico y entregó todo a su gente. Como en el escenario Quilmes los plomos preparaban todo para Catupecu, hacían algunas pruebas de sonido sobre los interines de temas de Divididos. En un momento, Ricardo se fue tras bambalinas, Arnedo y Catriel no sabían lo que sucedía y al volver, el cantante dijo: "Vamos a esperar que terminen de probar sonido al lado y seguimos. O mejor, deberían esperar que nosotros terminemos de tocar".
El público aplaudió el gesto del músico y los plomos desparecieron. El recital siguió su curso y un mítico momento se dio lugar en la escena: unx fan arrojó una zapatilla al guitarrista y este hizo un pequeño solo. De ahí en más, todo lo que la Aplanadora puede dar, lo dio sin más.
Nathy Peluso y su regreso a la Argentina
Volviendo en el tiempo, la artista nacional - que se radicó en España por mucho tiempo - volvió a sus pagos por primera vez y lo hizo en el Quilmes Rock. Nathy Peluso estaba muy emocionada por presentarse en el festival y no dejó de mencionárselo a su público una y otra vez.
Su show fue 100% performático. No dejó de bailar ni por un segundo. En eso, jamás perdió el aliento. Las pantallas la ayudaron mucho a crear los climas necesarios para cada canción. La salsa - género clave en su aura - reclamó su tierra latina entre la multitud que quería seguir los pasos de la artista.
Celebré fue el tema elegido para comenzar, seguido de Sana Sana, Veneno y Sugga. La gente estaba frenética con cada movimiento de Nathy. Incluso se corearon el reciente tema de la artista, Emergencia. Las gargantas la amaron.
Turf, Kapanga, Los Tipitos y Barbi Recanati: Dos escenarios, una corrida
Como en todo festival, las corridas entre escenarios para llegar a ver a unx u otrx artista son a veces muy épicas. Entre estas cuatro bandas - y muchas otras más que no llegamos a ver en el Geiser y el Enigma -, la marea de gente se cruzaba y chocaba en los pasillos que comunicaban cada espacio.
Para ver a Los Tipitos, Revista Broda llegó un poco tarde, pero salieron grandes fotos. Lo bueno fue que alcanzamos a ver la colaboración inesperada de la banda con Agos Nisi en el tema Campanas en la Noche. De ahí, "salió un pique" para surfear la ola de público que colmaba el Claro con La Franela y luego se quedaría para ver a Kapanga.
La única banda de Quilmes de todo el festival venía de Córdoba donde habían sido bautizados por la Mona Jiménez en el Festival Bum Bum. Por eso, su show en Buenos Aires arribaba con mucha adrenalina y felicidad, al menos eso fue lo que expresó el Mono en una entrevista para nuestro medio.
Quilmes Rock no me sueltes - el Mono de Kapanga
La banda reunió a todos sus grandes clásicos en los minutos que le marcaba el cronómetro. Por supuesto, para hacerle honor a dicho timer, El Mono Relojero fue el icono del show - aunque el cantante recordó ese mismo controlador en la cocina de MasterChef Celebrity que vivió hace muy poco.
En eso que la banda terminaba su show a tiempo y el público se dispersaba, corrimos hacia el escenario Rock para ver a Turf después de tanto tiempo. Cuando llegamos presenciamos los últimos temas y una lluvia de papeles plateados que decoraron la tarde soleada de otoño. Ya para Barbie Recanati, nuestra fotógrafa llegó a tomar unas buenas pics de la banda y yo... ya no tenía piernas y la tarde recién comenzaba.
